Netflix ha anunciado que la segunda de las dos películas de Nanatsu no Taizai: Ensa no Edinburgh, de la franquicia animada basada en el manga Nanatsu no Taizai, de Nakaba Suzuki, se estrenará mundialmente en su plataforma en agosto.
La primera se estrenó en Netflix ayer, 20 de diciembre de forma mundial.
Yuuki Kaji regresa como Meliodas (izquierda). Mikako Komatsu pone voz a Tristan de pequeño (centro), mientras que Ayumu Murase pone voz a Tristan de adolescente (derecha).
De izquierda a derecha:
- Kouki Uchiyama como un hada que Tristan (el hijo de Meliodas) conoce en su viaje.
- Yōhei Azakami regresa como Deathpierce.
- Kazuyuki Okitsu como Priest, el Saishi (sacerdote) de Edimburgo que controla una poderosa magia.
Además de:
- Shinnosuke Tokudome como Tyrone.
- Shino Shimoji como Kurumiru.
- Makoto Koichi como Minika.
La cinta gira en torno a Tristán, hijo de Meliodas y Elizabeth.
Bob Shirahata dirige el anime. Noriyuki Abe se encarga de la supervisión de dirección. Rintarou Ikeda escribe el guion. Alfred Imageworks y Marvy Jack se encargan de la animación. El tema Lemonade, está interpretado por SawanoHiroyuki[nZk]:XAI.
Nakaba Suzuki comenzó el manga Nanatsu no Taizai en la revista Weekly Shōnen Magazine en 2012. El manga iba a finalizar en mayo de 2019, pero continuó finalmente hasta marzo de 2020. El último tomo recopilatorio se puso a la venta el 15 de mayo de ese año. La obra se encuentra licenciada en España por parte de Norma Editorial.
El 27 de enero de 2021 se lanzó una secuela directa, titulada Mokushiroku no Yon-kishi, y tiene un nuevo protagonista, un nuevo enemigo, y un nuevo animal de compañía. Este manga también tendrá adaptación animada para televisión.
Nanatsu no Taizai: Fundo no Shinpan, llegó hasta el final de la historia del manga, y se estrenó el 6 de enero de 2021, en el canal TV Tokyo. Originalmente se iba a estrenar en octubre de 2020, pero se retrasó debido al COVID-19. En julio de 2021 se estrenó la película Nanatsu no Taizai: Hikari ni Norowareshi Mono-tachi.
Los siete pecados capitales representan a un grupo de malvados caballeros que intentaron en algún momento derrocar al rey de Britania. Durante la revuelta, lograron ser derrotados por los caballeros sagrados desapareciendo del reino. Una década después, los mismos caballeros sagrados organizaron un golpe de estado, tomando prisionero al rey y autodenominándose como los nuevos dueños de Britania. La princesa Elizabeth logró escapar y se puso como meta buscar a los siete pecados capitales, los únicos capaces de hacer frente a los Caballeros Sagrados.
